Para las utilities que buscan fortalecer su presencia en el mercado, es fundamental contar con una solución tecnológica que permita extender sus funcionalidades básicas de manera que se ajuste a los cambios regulatorios, las expectativas de los clientes y las necesidades del negocio. Implementar soluciones con estas capacidades es el objetivo de empresas que buscan evitar gastos elevados en ajustes funcionales de viejos y rígidos sistemas.
De acuerdo con un estudio llevado a cabo por la firma de investigación HFS, la demanda de alternativas digitales que contribuyan a agilizar los procesos de las utilities, crecerá significativamente en el corto plazo(1). Prueba de lo anterior es que casi el 40% de las empresas considera que contar con sistemas ágiles es la razón principal para la modernización de su solución CIS, tal como lo señala la firma de investigación y consultoría TMG Consulting(2).
Con el fin de tener una mayor capacidad de respuesta, las empresas están buscando de manera apremiante sistemas que no solo permitan una gestión completa de su operación, sino que también les brinden agilidad para reaccionar oportunamente y adaptarse sin contratiempos a los cambios que surjan en el negocio. La necesidad de contar con soluciones ágiles vuelve más urgente para los proveedores de servicios, debido a que operan en una industria dinámica que actualmente enfrenta grandes cambios, como el surgimiento de nuevos modelos de negocio que afectan la sostenibilidad de las organizaciones. Es por esto que la capacidad de estas empresas para ofrecer productos y servicios innovadores, introducir mejoras derivadas de las interacciones con los clientes y optimizar los procesos comerciales y operativos en cualquier momento y con simplicidad es fundamental para su éxito.
Contar con herramientas que faciliten la implementación de nuevas iniciativas de negocio adquiere cada vez más importancia al momento de seleccionar la tecnología adecuada para soportar las necesidades de las empresas de servicios públicos. Por lo tanto, incluir opciones para ampliar el alcance funcional del sistema de manera que éste pueda ser ajustado a las necesidades específicas de cada empresa, se ha convertido en una característica obligatoria para las soluciones modernas de última generación.
Afrontar con suficiencia los retos actuales y futuros de la industria es posible haciendo uso de soluciones CIS holísticas, las cuales proporcionan simultáneamente un alcance funcional integral que respalda todos los procesos del negocio, junto con mecanismos para ampliar su funcionalidad básica, lo que permite ajustarlas a todos los escenarios emergentes, con completa autonomía. La característica principal de estas soluciones es que son capaces de evolucionar de manera continua con el fin de ayudar a las empresas a cumplir con las expectativas de sus clientes, al tiempo que contribuyen a incursionar en nuevos modelos de negocio y asegurar su sostenibilidad en el mercado.
Smartflex es una solución holística altamente configurable que incluye un conjunto de herramientas avanzadas, las cuales otorgan a las empresas de servicios públicos la flexibilidad y agilidad necesarias para extender las funcionalidades básicas del sistema. Mediante la creación de aplicaciones adicionales y la adaptación de aquellas incluidas de forma nativa, Smartflex permite traducir las iniciativas de negocio en estrategias digitales exitosas y, al mismo tiempo, reduce los costos relacionados con el soporte y la personalización del software.
(1) HSF Research. (2018). HFS Blueprint Report: Utility Operations BPO, IT and Engineering Services. https://www.cognizant.com/industries-resources/energy_and_utilities/hfs-blueprint-utility-operations-excerpt-cognizant.pdf
(2) TMG Consulting. (2018). Utility Industry Disruption: 5 Profound Trends Impacting IT Modernization Projects. http://www.csforms.org/Conference42/Workshop%20pdfs/TMG.pdf
